Adultos: crisis vitales, salud mental y etapas de vida

La vida adulta atraviesa múltiples etapas y transiciones: decisiones profesionales, cambios de pareja, maternidad/paternidad, enfermedades, pérdidas, soledad, duelos, envejecimiento…
Cada etapa trae consigo desafíos psicológicos específicos, que muchas veces se viven en silencio o se posponen hasta que el malestar se vuelve evidente.

La terapia con adultos ofrece un espacio para detenerse, comprender y afrontar con herramientas lo que está ocurriendo.

Cuando buscar ayuda / Problemas habituales
  • Ansiedad y depresión, estrés crónico o sensación de agotamiento emocional.
  • Crisis vitales o existenciales: desorientación, falta de sentido, sensación de “estar atrapado”.
  • Problemas de pareja, separaciones o conflictos relacionales persistentes.
  • Duelo y pérdidas: familiares, de salud, de etapas de vida.
  • Estrés laboral, bloqueos profesionales o agotamiento.
  • Dificultades de autoestima, inseguridades o autoexigencia excesiva.
  • Soledad no deseada, aislamiento o dificultades para vincularse afectivamente.
  • Problemas derivados de cambios en la salud, enfermedades crónicas, dolor, limitaciones físicas.
  • Etapas de envejecimiento o tercera edad, con sus procesos de adaptación, pérdidas, cambios familiares y necesidad de sostén emocional.

Pedir ayuda en la adultez no es un signo de debilidad, sino un acto de lucidez y cuidado: muchas veces, una intervención oportuna evita cronificar problemas y abre caminos nuevos.